Es sin duda un elemento fundamental para dotar a nuestros
tableros de melamina un aspecto más real, dado que ocultan las partículas de aglomerado con los que están hechos estos tableros. Suelen estar hechos de materiales plásticos y de
madera aunque lo podemos encontrar de aluminio.
Estos cantos pueden pegarse al tablero por distintos medios como son:
- Con cola termofusible, que basta aplicarlo con una plancha o pistola de aire caliente para que se adhiera a los tableros.
- Sin cola, este necesita de cola de contacto para su unión.
- Autoadhesivo, lleva un pegamento separado por un papel aislante, a modo de las típicas pegatinas, basta con separar el papel del canto y ya lo tendremos listo para pegarlo.
Estos cantos los encontramos de varios grosores, cuanto más gordo más protejerá el canto pues es más duro, el único inconveniente es que a mayor grosor más complicado será de poner con herramientas de
bricolaje. El grosor también nos permitirá de hacer una pequeña curva en el filo para suavizar este y que no acabe en un ángulo que pueda resultar muy pronunciado y causar heridas.
Ya por último estaria el apartado del ancho, para adaptarse a todos los grosores de los tableros.