En esta ocasión me gustaría hablar o mas correctamente escribir sobre las ferreterías de
toda la vida, las que tenemos en nuestros barrios.
Esta claro que los grandes centros de
bricolaje les han quitado cierto protagonismo, que no importancia. Todos sabemos las grandes ventajas que estos grandes comercios nos aportan, como son:
- Gran variedad de productos.
- Tarjetas de club de socios.
- Facilidades de pago.
- Grandes promociones.
- Devoluciones con relativa facilidad, entre otras.
Pero en muchos casos, no se nos ocurre ir a estros centros de bricolaje ante todo porque ya sabemos de antemano que esto o lo otro no lo vamos a encontrar, o bien por que desplazarnos hasta los grandes comercios ( que normalmente se encuentran en las afueras) nos va suponer, por una parte una perdida de tiempo en el trayecto y por otra el gasto de carburante, lo que implica un encarecimiento de la compra que en muchos casos no merecerá la pena.
Entre las ventajas que nos brindan la
ferretería de siempre podemos encontrar las siguientes:
- Buen conocimiento sobre los productos que se venden.
- Trato más personal.
- Cercanía de nuestra vivienda.
- Productos muy variados y especializados.
- No hace falta comprar los artículos en blister y adquirir justos los necesarios.
- Las esperas suelen ser inferiores a la hora de pagar.
A mi lo que más me sorprende es como almacenan las mercaderías para rentabilizar al máximo el poco espacio de que disponen, pues podemos encontrar desde una junta de goma para reparar un grifo, hasta unos imanes, pasando por un juego de sartenes y por que no un plástico de burbujas para proteger cualquier cosa. O lo que es lo mismo cosas super dispares.
En cuanto a los precios de los productos que la
ferretería cercana a nuestra casa puede ofrecernos frente a los de las grandes superficies, podría decir que no hay muchas diferencia, pero quiero anotar que frente a las grandes ofertas de estos últimos no tienen nada que hacer.
Con todo esto quiero decir que las
ferreterías siguen siendo un comercio que tanto como a una persona dedicada a la
carpintería como a un
bricolador, puede ser una elección.